Viktor Frankl, un destacado neurólogo y psiquiatra austriaco, convirtió su experiencia en los campos de concentración nazis en una poderosa enseñanza sobre la fortaleza del espíritu humano. A partir de su vivencia, Frankl desarrolló la logoterapia, una innovadora corriente de psicoterapia que destaca la importancia de encontrar un propósito en la vida como motor esencial para superar las adversidades. Su legado perdura como un faro de esperanza, mostrando cómo el sentido de la vida puede ser la clave para enfrentar incluso las circunstancias más difíciles.